2.9.12

Salir en forma de grito del fondo del corazón, así él notó que

estaba vivo, que había sido feliz y ahora se le escapaba. No 

era la primera vez y recordó que peleó por ello, golpeó, casi 

mató, casi murió por un tiempo. Gritar ya no era suficiente y

aprendió a llorar, se desahogó. No era cierto, llorar también

ayudaba a los hombres.